Los tratamientos anticonceptivos nacieron para darnos la última palabra con respecto a la maternidad. En la actualidad, existen muchísimas opciones de anticonceptivos para que elijas de acuerdo a tus necesidades y metas como madre, pero sobre todo como mujer.
En Argentina, en los últimos cinco años, “el chip” se posicionó como uno de los métodos preferidos para prevenir los embarazos no deseados, según informes de la Dirección de Salud Sexual y Reproductiva de la Secretaría de Salud de la Nación.
Y si bien recibe el nombre de “chip”, en realidad este procedimiento es un implante hormonal subdérmico, que se ganó su popularidad entre las argentinas porque da muchísimas ventajas frente a otras opciones anticonceptivas.
¿Por qué cada vez más mujeres eligen el chip?
Uno de los principales motivos es la libertad que te da. El chip es un método anticonceptivo hormonal cuya eficacia no dependerá de vos: en el caso de que tomes pastillas, no tenés que acordarte de tomártela cada 24 horas; si te cuidás con la inyección, no hace falta que lleves un conteo exacto de los días que pasan desde la última aplicación; y si usás el parche, no dependés del apósito para inhibir la ovulación. El implante subdérmico funciona con el sólo hecho de colocártelo. A partir de entonces, actúa solo.
Físicamente, el chip consiste en una o dos barras de plástico flexible, del tamaño de un fósforo, que se insertan por abajo de la piel del brazo a través de una pequeña incisión de menos de un centímetro. Pero tranquila que no duele nada: se realiza con una agujita especial y el médico usa anestesia local para el procedimiento.
Otra ventaja por la que “el chip” se volvió tan popular es su duración: es un tratamiento anticonceptivo de largo plazo, que libera hormonas que impiden la ovulación durante un período de tres a siete años.
Estas son los principales beneficios que convierten al chip en una alternativa llamativa para mujeres entre 15 y 24 años decididas a no cambiar su rutina para llevar el control de su fertilidad.
¿Exactamente… cómo impide que quedes embarazada?
El chip evita la liberación de óvulos, algo similar a lo que hace la pastilla. Pero también libera hormonas -principalmente progestina- que hacen que el moco del cuello uterino sea tan espeso, que los espermatozoides no puedan atravesarlo. Podría decirse que funciona como si fuese una minipastilla.
Este doble movimiento lo vuelve uno de los métodos reversibles más efectivos: tiene 99.5% de efectividad. Y antes de desconfiar de este margen de error mínimo, acordate que ningún anticonceptivo es 100% efectivo. Pero, este se le acerca bastante: las estadísticas aseguran que sólo una de cada cien mujeres que usan el chip, queda embarazada sin planearlo.
¿Cuánto tiempo funciona el chip?
Depende de lo que vos quieras y de lo que tu médico considere más conveniente para vos, porque los efectos del chip se eliminan de tu cuerpo a los pocos días de sacarte las barritas del brazo.
Como te contamos antes, hay una opción que controlará tu fertilidad durante cinco años, y otra menos extensa, que funciona durante tres.
Sólo hay una regla: hacerte los chequeos previos que te indique el médico, y asistir a colocártelo dentro de los siete primeros días del período menstrual, para que estés protegida desde el primer día.
Las opciones están disponibles, lo único que necesitas es analizar cuáles son tus planes y tomar una decisión al respecto. Vos tenes el poder de decidir cómo vivir y cuándo querés iniciar tu etapa maternal.
Viví tu vida a tu ritmo, extendé tu fertilidad
Como mujer, hoy tenés la posibilidad de elegir sobre tu vida: en qué querés trabajar, cómo querés vivir tu relación de pareja, qué ponerte. Y, claro, cuándo querés ser mamá.
El reloj biológico, tu situación laboral o el hecho de que terminaras con tu novio de toda la vida, ya no son razones para comprometer tu posibilidad de ser mamá: ¡extendé tu fertilidad!
La criopreservación de óvulos es la herramienta para que una mujer de estos tiempos, independiente, consciente de su potencial, retome la libertad de vivir su vida a su propio ritmo.
Criopreservar los óvulos es la posibilidad de tu planificación reproductiva, para que puedas desarrollar tu vida sin límites. Ya no tenés que sacrificar tus sueños para formar una familia ¡Podés tener las dos cosas!
Tener tu fertilidad resguardada con tus óvulos vitrificados es un proceso ambulatorio de baja complejidad que sólo te tomará 21 días, después vas a poder seguir tu vida sin presiones.
¿Por qué hay que criopreservar los óvulos?
La edad es un factor importante en la fertilidad. Las mujeres tenemos óvulos durante toda tu vida, desde que nacemos con, aproximadamente, dos millones de ovocitos. Esta es la cantidad de posibles óvulos que pueden madurar o no.
Ese número de ovocitos es conocido como reserva ovárica y es súper importante porque esa cifra no aumentará a lo largo de nuestra vida, sino que dismunuirá poco a poco a partir de la primera ovulación.
Ya en la pubertad, esta reserva se habrá reducido a cerca de 500 mil ovocitos. A partir de entonces, en cada período menstrual sólo 400 o 500 ovocitos llegan a madurar.
Nuestra reserva ovárica se agota alrededor de los 50 años y es cuando ocurre la “menopausia”. Sin embargo, si una mujer tiene una cantidad menor a la media de ovocitos, sufrirá una menopausia precoz.
¿Querés conocer más sobre la criopreservación? Es muy fácil: descargá nuestro eBook gratuito y conocé todos los detalles de esta revolución.