Como regla general, a medida que vamos madurando nuestro cuerpo madura con nosotras. A partir de la pubertad empezamos a experimentar cambios que, si somos sinceras, no estamos muy seguras de por qué ocurren.
A pesar de que la relación con nuestro cuerpo es para toda la vida, son pocas las mujeres que realmente tratan de entender cómo funciona. Es así como muchas llegan a una edad adulta, desconociendo un montón de datos esenciales acerca de ellas mismas.
Por ejemplo, ¿sabías que existen diferentes tipos de senos? En forma de pera, caidos, redondos, pequeños… ¡Cada mujer tiene un par de pechos únicos!
Quizás los temas menos explorados son en torno a la sexualidad femenina; muchas llegan al momento de sus vidas que quieren sentar cabeza y no saben realmente cómo funciona todo el aparato.
¿Qué es la fertilidad?
La fertilidad es la capacidad que tienen los seres humanos de reproducirse. En el caso de las mujeres, los años fértiles comienzan a partir de su primer periodo, pero su capacidad va disminuyendo con el pasar de los años.
La edad para comenzar a sentar cabeza varía entre culturas. Pero cada vez es más común que las mujeres esperen más tiempo.
Este es un hecho que nos permite pensar que el rol de la mujer ha ido evolucionando; atrás quedaron los días donde nuestra única función era tener hijos. Lo cierto es que somos personas con aspiraciones y sueños que muchas veces no están alineadas con formar una familia de forma inmediata.
A pesar de esto, no podemos ignorar el hecho de que nuestra capacidad reproductiva decrece a partir de cierta edad. Traer una vida al mundo no viene sin complicaciones, cuidar de un bebé es un trabajo de tiempo completo, al menos los primeros meses.
Es por esta razón que muchas mujeres sienten la necesidad de tener que elegir entre sus metas personales o laborales y tener un hijo.
Pero nos estamos adelantando, antes de adentrarnos un poco más en este tema es importante que conozcas cómo funciona la fertilidad femenina.
Así funciona la fertilidad
Como mencionábamos más arriba, la mujer comienza a ser fértil a partir de su primera menstruación. Para lograr concebir es necesario que un óvulo maduro se fusione con un espermatozoide, creando lo que se conoce como embrión.
Para que esto ocurra la mujer primero tiene que producir el óvulo, esto es posible gracias a la reserva ovárica. Si nunca has escuchado hablar de esta reserva no te asustes, estamos aquí para explicarte.
La reserva ovárica es la cantidad de ovocitos que las mujeres tienen disponibles en los ovarios y que son capaces de madurar para convertirse en óvulos.
Una mujer nace con un número determinado de ovocitos en la reserva, este número irá disminuyendo poco a poco y más rápidamente a partir de la primera menstruación.
Cuando comienza la pubertad habrán aproximadamente unos 400.000 o 500.000 ovocitos, a partir de cada uno de los ciclos menstruales solo unos 400 o 500 madurarán.
Los demás no llegarán a madurar ni serán ovulados, así hasta llegar a su agotamiento. Una vez que se agotan comienza la menopausia en la mujer.
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Como podrás ver la fertilidad de la mujer no es un tema simple, hay personas que nacen con una menor cantidad de ovocitos lo que eventualmente se traduce en una menopausia temprana.
Es importante que sepas que este agotamiento ocurre alrededor de los 40 o 45 años, lo que quiere decir que las mujeres tienen un tiempo determinado en el que son fértiles.
¿Por qué la fertilidad desmejora con la edad?
Cuando hablamos de ovocitos no solo podemos hablar de la cantidad que existen, también influye la calidad de los mismos. A medida que pasan los años estos envejecen, ocasionando que los óvulos que maduran vayan perdiendo las características que aseguran su buen funcionamiento.
Esto hace que sea más complicado para los espermatozoides fecundar al óvulo y, en caso de que lo logren, el riesgo de que el bebé nazca con alguna alteración cromosómica es mayor.
Es a partir de los 35 años que comienza este descenso en calidad y en cantidad. Una vez que la mujer tiene 40 años la cantidad de ovocitos es muy pequeña, lo que reduce las oportunidades de que ocurra un embarazo exitoso.
No te preocupes, contás con opciones
Una vez que sabes todo esto no debes entrar en pánico. Sí tu capacidad reproductiva va disminuyendo con cada día que pasa, afortunadamente contás con opciones para contrarrestar al llamado “reloj biológico“.
Por ejemplo, podés criopreservar tus óvulos.
Esta práctica lo que hace en congelar tus óvulos para que no pierdan su calidad con el pasar de los años. De esta forma podés ocuparte de tu carrera, tu familia, tu pareja e incluso de ti misma, sin tener la preocupación constante de que debes tener hijos porque luego será muy tarde.
Recordá que hoy en día el tiempo lo decís vos; no dejes que nada ni nadie determine cuándo serás madre.
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